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El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) advierte que la exposición por mucho tiempo a los rayos solares propicia la pérdida de sales y líquidos corporales.
Esto provoca alteraciones en la temperatura corporal que desencadenan en el denominado golpe de calor, especialmente en los meses del año donde las temperaturas y el índice de humedad ambiental son intensos.
El titular de la Jefatura de Servicios de Prestaciones Médicas del IMSS en Chiapas, Roberto Sánchez Moscoso, informó que el golpe de calor se presenta cuando el cuerpo no logra disipar la alta temperatura que genera o absorbe, y en consecuencia supera la temperatura normal, afecta el sistema nervioso central, provoca cefalea e incluso un posible coma.
Añadió que este trastorno suele afectar a personas que realizan ejercicio físico intenso al mediodía, donde existe demasiado calor, y a personas enfermas o de edad avanzada, cuyo deterioro sistémico no permite la adaptación de su cuerpo a las altas temperaturas ambientales.
El especialista del IMSS aconsejó tener especial cuidado con los bebés, quienes aún no cuentan con madurez de los mecanismos que regulan su temperatura; con los adultos mayores, ya que por su edad avanzada han perdido esa capacidad de regulación, y con los pacientes con alguna enfermedad crónico degenerativa, que por su situación médica se precipitan al golpe de calor.
Indicó que los síntomas que presenta este trastorno térmico, son: dolores agudos de cabeza, mareo, náuseas, piel enrojecida, pupilas dilatadas, palidez, fiebre, debilidad muscular, en algunos casos confusión, convulsiones y pérdida del conocimiento.
El tratamiento se basa en la hidratación y enfriamiento inmediato del paciente, así como el apoyo a los órganos que pudieran estar afectados, destacó.
Por ello, recomendó usar ropa ligera, de colores claros y de algodón, de preferencia, así como evitar actividades al aire libre entre las 11:00 y las 15:00 horas, y no automedicarse en caso de necesitar auxilio médico.
Por último, mencionó que en caso de salir a la calle, es necesario usar filtro solar en las áreas expuestas al sol, además de cubrirse con sombrilla, gorra o sombrero. También, mantenerse hidratado con agua natural y, de ser posible, no acudir a lugares concurridos donde se concentre el calor.
