La reina Isabel II retiró todos sus títulos militares al príncipe Andrés, que será juzgado en Estados Unidos por su presunta implicación en un escándalo de abuso sexual a una menor, anunció este jueves el Palacio de Buckingham.
En un comunicado emitido por la residencia oficial de la soberana británica, la Casa Real indicó que con la aprobación de la reina y su acuerdo, los títulos militares del duque de York y sus patrocinios reales han sido devueltos a la reina.
El palacio anuncia además que el duque de York continuará sin ejercer ninguna función pública y defenderá su caso (judicial) como ciudadano privado, agrega la nota.
El duque de York continuará sin ejercer ninguna función pública y está defendiendo su caso (judicial) como ciudadano privado, agrega la nota.
A partir de ahora, el hijo de Isabel II no podrá tampoco utilizar más el título de Su Alteza Real en ninguna capacidad oficial.
Nada más hacerse pública esta drástica medida, que asesta un enorme varapalo al duque y su entorno, una fuente anónima cercana a Andrés señaló a medios británicos que este seguirá defendiéndose de las alegaciones de Virginia Giuffre.
Esa mujer ha mantenido de manera consistente que fue traficada cuando era menor por el magnate millonario Jeffrey Epstein, con la ayuda de su mano derecha y expareja Ghislaine Maxwell, para mantener relaciones sexuales con el príncipe.
Dada la dureza con que el juez (Lewis) Kaplan recibió nuestros argumentos, no nos sorprende su dictamen, apuntó esa misma fuente cercana a Andrés después de que el magistrado rechazara todos los argumentos de la defensa del duque para que se archivara la causa.
Agregó, sin embargo, que no se trató de un juicio sobre la validez de las alegaciones de Giuffre, al tiempo que consideró que este proceso es un maratón, no un sprint y el duque continuará defendiéndose contra estas acusaciones.
Queja de veteranos
La decisión de la monarca llega después de que unos 152 veteranos de guerra de este país instaran a la monarca a que retirara estos honores a su hijo tras conocerse ayer el veredicto judicial sobre el caso.
Muchos analistas consideraron que, lejos de ayudarle, su intervención televisada perjudicó aún más su imagen ante los ciudadanos.
Con información de EFE