Tras una serie de denuncias ciudadanas, la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un operativo en la Plaza Comercial “Izazaga 89”, ubicada en la colonia Centro, de la alcaldía Cuauhtémoc, en la Ciudad de México, donde inmovilizó más de 700 juguetes de réplica de armas de fuego, para su posterior destrucción.
La verificación fue en los comercios: Importaciones Mayen, Lovesn. Mychinashop MX y RM Regalomex, los cuales vendían productos denominados réplicas de armas de fuego de diversas marcas y modelos.
El establecimiento Naystore no pudo ser verificado toda vez que se encontraba cerrado al momento de la diligencia.
En total se inmovilizaron y se pusieron a disposición de esta Procuraduría para su destrucción, 716 productos, por incumplir con lo dispuesto en la Norma Oficial Mexicana NOM-161-SCFI-2003 seguridad al usuario-Juguetes/Réplicas de armas de fuego, a efecto de prevenir posibles afectaciones a los consumidores y a la ciudadanía.
Los casos más significativos se registraron en las tiendas RM Regalomex y Mychinashop MX, donde se inmovilizaron en conjunto 622 piezas.
En el primer caso fueron 473 unidades de las marcas Gun Cluó Play Set (262) y Xin ye, Swat equipment (163); en el segundo comercio fueron 149 de la marca Heng Huo Chang.Algunas marcas retiradas de los comercios son: “Toys”, con apariencia, forma y configuración tipo ametralladora; Geckos, de apariencia pistola Star calibre 9 mm; “Xinchen Toys” (apariencia ametralladora); Heng Huo Chang; Xin ye, Swat equipment; “Gun Cluó Play Set” y “Special”.
Se destaca que los productos fueron fabricados básicamente en color negro y plateado con dimensiones aparentemente iguales a las pistolas profesionales y algunos cuentan con el mecanismo conocido como “cortar cartucho”.
Algunas marcas carecen de la advertencia sobre “peligro de utilizar otros distintos a los suministrados” o los recomendados por el fabricante y sobre el peligro de “disparar a quemarropa”, además, NO presentan nombre, denominación o razón social, domicilio del proveedor, importador o responsable de la fabricación del producto.
Asimismo, no muestran la leyenda que identifique el país de origen del producto (se detectó que algunas marcas traían escrito “Hecho en China”); o el símbolo que indique la edad del consumidor recomendada por el fabricante para su uso ni las advertencias para el manejo seguro y confiable de los insumos.
