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El presidente argentino, Alberto Fernández, llegó este lunes a la Ciudad de México para una gira de tres días, la cual incluye una participación en la mañanera de Andrés Manuel López Obrador.
La polémica se armó porque viajó, junto a su comitiva, en el avión privado que usa el astro del futbol, Lionel Messi, bajo el argumento de que se trata de una decisión sanitaria.
Según se pudo saber, el costo del traslado fue de 160 mil dólares por los cuatro días de alquiler, que se hizo a través una empresa tercerizada, que es la que se encarga de manejar los alquileres de la aeronave.
Lo anterior quiere decir que no hubo ninguna conexión del Gobierno con el jugador para esta gestión puntual.
El avión es un Gulfstream V, matrícula LV-IRQ, dotado de 16 asientos que pueden transformarse en camas. Cuenta con cocina, dos baños y una ducha.
La aeronave fue fabricada en 2002 en los Estados Unidos y fue adquirido por Leo en 2018 a cambio de 15 millones de dólares.
La noticia ha cobrado fuerza en México porque AMLO, el anfitrión del mandatario argentino viaja en vuelos comerciales y se ha negado a utilizar el avión presidencial adquirido en los gobiernos de Calderón y Peña Nieto.
(Con información de Ole.Com.Ar)
