El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, rechazó el martes la sugerencia del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de que podría utilizar la «fuerza económica» para convertir a Canadá en el 51º estado de Estados Unidos.
«No hay ni la más remota posibilidad de que Canadá se convierta en parte de Estados Unidos», dijo en una publicación en X.
«Los trabajadores y las comunidades de nuestros dos países se benefician de ser el mayor socio comercial y de seguridad del otro».
A Trump, que habló en su residencia de Mar-a-Lago, se le preguntó si estaba considerando usar la fuerza militar para adquirir Canadá.
«No, fuerza económica», respondió. «Porque Canadá y Estados Unidos, eso sí que sería algo».
Los comentarios del presidente electo Trump demuestran una incomprensión total de lo que hace a Canadá un país fuerte. No retrocederemos jamás ante las amenazas», dijo en X Melanie Joly, ministra de Relaciones Exteriores.
Poco después, el primer ministro saliente, Justin Trudeau, añadió: «Jamás de los jamases Canadá formará parte de Estados Unidos».
Trump, que lleva tiempo quejándose del superávit comercial de Canadá con Estados Unidos, había dicho antes a periodistas que la frontera era una «línea trazada artificialmente».
Trump ha amenazado con imponer un arancel del 25 por ciento a las importaciones procedentes de Canadá, que envía el 75 por ciento de todas las exportaciones de bienes y servicios al sur de la frontera.