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Solamente en enero de este año más de 12 mil personas, entre ellas tres mil niños y adolescentes, cruzaron desde Tecún Umán, Guatemala, a México.
En 2018, más de 30 mil niños estuvieron en centros de detención, por lo que es urgente que el Legislativo mejore el andamiaje legal para brindar mayor protección a la niñez por su condición de migrantes.
Lo anterior se indicó en el Senado de la República, donde el Pleno aprobó un dictamen para robustecer la defensa de los derechos de niñas, niños y adolescentes, tanto nacionales como migrantes no acompañados, fortaleciendo los mecanismos de protección establecidos en la ley de la materia.
La reforma a la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, establece la colaboración de la Coordinación General de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) con el Instituto Nacional de Migración (INM), para adoptar medidas de protección especial, en caso de que los Sistemas DIF identifiquen a menores susceptibles de refugio o asilo.
Adicionalmente, plantea que la Comar podrá colaborar con el INM en el diseño y administración de las bases de datos de niñas, niños y adolescentes migrantes extranjeros no acompañados.
El dictamen turnado al Ejecutivo Federal para sus efectos constitucionales, también introduce la definición del Sistema Municipal de Protección, como el Sistema de Protección de niñas, niños y adolescentes de cada municipio, con el propósito de que éstos generen políticas públicas en su beneficio.
La senadora Josefina Vázquez Mota, presidenta de la Comisión de Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, subrayó que los menores, antes que ser migrantes, tienen derechos por lo que se tiene que velar por su interés superior, y ser respetados sus derechos sin importar nacionalidad, raza o sexo, entre otros.
Agregó que no existe una cifra exacta de menores de edad no acompañados que cruzan la frontera sur en su tránsito para llegar a Estados Unidos. No obstante, informó que de octubre de 2018 a febrero de 2019 el Instituto Nacional de Migración detectó a más de ocho mil niñas, niños y adolescentes migrantes, de los cuales, más de cuatro mil viajaban sin compañía.
