José Cruz Delgado/ GMx
Morelia, Mich.- La indignación del genio periodístico por el artero asesinato del comunicador Armando Linares lo orilló a salir a las calles para exigir a las autoridades justicia y como muestra de rechazo a los asesinatos en contra de los periodistas.
La manifestación partió de la fuente de las Tarascas, donde los comunicadores gritaron consignas en contra de las instituciones ante la falta de seguridad y protección para quienes se dedican al ejercicio periodístico, ya que en lo que va del 2022, ocho periodistas han sido asesinados en el país.
hicieron un pase de lista de los compañeros asesinados, mientras que ninguna autoridad los atendiera, mucho menos los diputados que sólo cual ando les conviene se dicen fieles defensores de la libertad de expresión.
Es más, la policía cerró el acceso a loa periodistas manifestantes hasta que finalmente abrieron la puerta para que ingresaran sin que ningún legislador se dignara a atenderlos.
Del 2006 a la fecha han sido asesinados en Michoacán, Jaime Arturo Olvera Bravo, Gerardo Israel García Pimentel, Miguel Ángel Villagómez Valle, Martín Javier Miranda Avilés, Hugo Alfredo Olivera Cartas, Rosa María Ríos Campos, Salvador Adame Pardo, Fidel Ávila Gómez, Luis Eduardo Ochoa Aguilar, Abraham Mendoza Mendoza, Roberto Toledo Barrera, Armando Linares.
José Antonio García Apac, Cristian Axel López Cruz, Juan Pablo Solís, Mauricio Estrada Zamora, Rafael Pérez, María Esther Aguilar Cansimbe y Ramón Ángeles Zalpa, son periodistas reportados como desaparecidos, también, todos, en Michoacán.
Y para tender una cortina de humo en torno al asesinato de Armando, la ineficiente Coordinación General de Comunicación Social del Gobierno de Michoacán hizo un llamado a comunicadores y periodistas a instalar una mesa de trabajo para definir una agenda de acciones en favor del libre ejercicio del periodismo, y preservar la integridad de las y los trabajadores de medios de comunicación.
Después de ahogado el niño quieren tapar el pozo.
Cabe señalar que el gobernador morenista ni siquiera ha hecho un pronunciamiento.
