El Gobierno estadounidense requerirá a los solicitantes de residencia permanente y de otros tipos de visa tener la vacuna contra el COVID-19 a partir del 1 de octubre, anunció el Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS).
Este anuncio sigue al realizado en este sentido por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) el 17 de agosto pasado.
De esta forma, USCIS pedirá a los solicitantes sujetos al examen médico de migración que completen la serie de vacunas anticovid, ya sea de una o dos dosis, según el fabricante del suero y proporcionen la documentación pertinente.
El requisito entra en vigencia el 1 de octubre y se aplicará de manera prospectiva a todos los Formularios I-693 firmados por los médicos en esa fecha o después.
En general, las personas que piden convertirse en residentes legales permanentes deben someterse a un examen médico para demostrar que están libres de cualquier condición que pudiera hacerlos inadmisibles por motivos relacionados con la salud, y deben documentar los resultados en el Formulario I-693.
La regla excluye a los niños solicitantes de visa de migrante, para quienes no se recomiendan las vacunas contra el COVID-19 debido a su edad y a las personas que por motivos de salud no pueden recibir la vacuna.
También estarán exentos los solicitantes de residencia permanente de países donde las vacunas contra el COVID-19 no están disponibles.
Además se considerarán exenciones para solicitantes con objeciones religiosas o morales para recibir la vacuna.
Con información de EFE