Canadá registra hasta este viernes 77 casos confirmados de la denominada viruela del mono, casi todos detectados en Quebec, donde las autoridades consideran que la situación es «preocupante».
La nación norteamericana había confirmado sus primeros dos casos el 20 de mayo en esa provincia francófona.
Una situación considerada «preocupante», explicó el doctor Howard Njoo, administrador en jefe adjunto de la agencia federal de salud pública canadiense, durante una conferencia de prensa. Las autoridades temen en particular «que se desarrollen casos en familias y que afecten a mujeres embarazadas o niños pequeños», añadió.
Njoo también aclaró que esta propagación «no está (limitada) a ningún grupo o entorno en particular» y, por lo tanto, puede afectar a «cualquiera, independientemente de su identidad de género u orientación sexual».
En ese sentido, se entregaron vacunas contra la viruela a la provincia. Pueden ser efectivas para proteger los casos de contacto porque no existe cura específica para la viruela del simio, que generalmente se sana sola.
La viruela del mono es principalmente una enfermedad leve, pero su propagación fuera de las áreas endémicas, como África occidental, sigue siendo motivo de preocupación.
Desde que comenzó el pico actual de casos hace casi un mes, se han notificado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) 550 casos en 30 países, principalmente europeos, donde la enfermedad no es endémica y se detecta muy raramente.
Esta enfermedad infecciosa se caracteriza por la aparición de erupciones, que pueden ser dolorosas, sobre todo si se encuentran en zonas sensibles como los genitales.