Edilberto Regalado, tenor originario de Juchitán Zaragoza, Oaxaca, murió repentinamente de un infarto mientras interpretaba una canción durante la misa de celebración de San José, en su tierra natal, en la región del Istmo de Tehuantepec.
El artista de origen zapoteca, en su juventud emigró a la Ciudad de México para estudiar canto en el Conservatorio Nacional de Música, posteriormente aplicó para ingresar a la Casa de Ópera en Zúrich, Suiza.
También vivió en Alemania desde 1997 hasta fecha reciente, aunque visitaba frecuentemente México y el municipio de Juchitán, Oaxaca, para ofrecer recitales y conciertos de música mexicana y en zapoteco, mixteco y náhuatl.
Durante su prolífica carrera profesional colaboró para destacadas casas operísticas alemanas, entre ellas Schwerin, Koblenz, y Rudolstadt.Hasta 2005 fue tenor principal en la Casa de Ópera de Eisenach, Alemania, en donde radicó con su esposa e hija.
El tenor zapoteco resaltó que hablar lenguas indígenas le facilitó aprender alemán, francés e italiano.Lo más importante al interpretar piezas en lenguas originarias es la honestidad y hacerlo con claridad, pues quien canta debe mostrar lo que se está sintiendo”, asentó.
En su estancia por Juchitán expresó su propósito de cantar, “lo único que quiero es que me inviten a cantar”, y retomó sus presentaciones en lugares y festividades públicas.“Guendanabani”, “La llorona”, “La Martiniana” y “Bacaanda”, son algunas de las piezas que interpretó en diidxazá (zapoteco).
Por: Excélsior
